Recuerdo el día que uno de mis Maestros me dijo:
""Vosotras, mujeres definidas por Hesiodo, como las rameras Sagradas poseedoras de la sensualidad Mágica con la que lograis que las conductas del hombre maduren, ha día de hoy formais parte de las milenarias victimas provocadas por la injusticia.
A pesar del respeto que me merece mi Maestro, me sentí ofendida.
Porqué yo voy a ser una victima, o todas aquellas que decidimos hacer la prostitución vamos a ser victimas.....??
Cuando me introdujeron en el mundo de la Victimologia fué cuando realmente comprendí el significado de las palabras de mi Maestro.
Mientras que la prostitución siga siendo vista bajo la perspectiva abolicionista, la prostituta seguirá siendo una doble victima.
Por un lado sufrirá la Microvictimación, realizada por los delitos tipificados en el Codigo Penal y por otro continuara siendo presa fácil de una Macrovictimación, aquella que vá más allá de las infraciones a las Leyes y que existe como realidad social aunque no la queramos ver; es decir esa realidad de las estructuras sociales injustas que estigmatizan como Macrovictimizantes.
Tal como nos definió el Sr.Beristain, la Macrovictimación es un mal mayor y peor que la Microvictimación, que se hace patente a quien contempla la realidad con pupila alerta.
Si la Victimologia es una ciencia nacida para y por la victima, considero que todos aquellos que se ganan el pan por la defensa Victimal deben ser eficazes en su labor y conscientes de que la Victimologia vá más allá de el simple delito punitivo, si no son consecuentes con los Fundamentos de la Victimología, lamentablemente esta nueva ciencia será profanada por intereses propios más que victimales.
